Todas las industrias han estado atravesando un período de grandes cambios, sin embargo, son las empresas de retail que se han visto más afectadas a estas modificaciones los últimos años.
La tecnología innovadora trae consigo muchas transformaciones, por lo mismo, la gente, al realizar sus compras de manera Online, busca tener la misma experiencia que cuando va a comprar a las tiendas físicas, y por otro lado, quieren mantenerse conectados y disfrutar de todas las características de las compras en línea mientras visitan una tienda local.
Siguiendo en el mismo contexto, “la Internet de las Cosas” (IoT por sus siglas en inglés) ha sido uno de los temas más palpitantes dentro de este sector. Es un tema recurrente en las conversaciones y un concepto que tiene el potencial de impactar cómo vivimos y cómo interactuamos con nuestras máquinas. A medida que Internet se ha vuelto más accesible, y la adquisición de los Smartphones está aumentando, se están creando más dispositivos con capacidad Wi-Fi, lo que significa que cada día estamos más conectados con lo que nos rodea.
“La Internet de las Cosas” (IoT) permite a los dispositivos comunicarse, analizar y compartir datos. Algunas aplicaciones incluyen, por ejemplo, mantenimiento predictivo para evitar problemas de consumo de energía o vigilancia de la temperatura para garantizar la seguridad de los alimentos; También puede ayudar a las tiendas a movilizar la mercancía de manera más eficiente, o identificar y personalizar la experiencia de los clientes leales y otros visitantes, además de dirigir a los vendedores para ayudar a los clientes, o anunciar eventos a través de dispositivos móviles.
Algunos, si no la mayoría de nosotros ya hemos visto alguna caja de autoservicio, donde los compradores pueden escanear, procesar y pagar por sus compras sin tener que pasar por una caja común, lo cual es muy interesante y de gran ayuda para las personas que tienen prisa. Aunque los clientes todavía podrían enfrentar las filas dependiendo de la demanda de la tienda.
Ahora, las empresas están decididas a llevar las compras a un nuevo nivel. Amazon, por ejemplo, presentó “Amazon Go” en diciembre pasado, una red de supermercados que no cuentan con cajeros y donde no hace falta esperar y hacer largas filas para poder pagar.
Ver: Video Amazon Go
Las oportunidades son ilimitadas, y la transición debería ser más evidente en un futuro próximo, ya que empezaremos a encontrar códigos de barras de escaneo para mostrar información de productos como colores y tamaños, críticas y comentarios desde redes sociales, espejos inteligentes que permiten a los clientes probar diferentes ropas virtualmente, estantes inteligentes en la tienda que detectan cuando el inventario está bajo en stock, etiquetas de precio inteligente que se pueden cambiar en tiempo real basado en la demanda u otras tendencias, cupones digitales personalizados entregados a los clientes al entrar en la tienda o beacons que entregan información sobre la tienda a visitantes de mayor frecuencia.
Se espera que la experiencia de compra se transforme radicalmente, siguiendo las muchas ideas que se están desarrollando junto con la manera en que interactuamos con las tiendas físicas, ya sea un centro comercial, una tienda de comestibles o tienda de departamento, sin embargo, el cambio también traerá una cantidad innumerable de oportunidades para que las empresas mejoren sus puntos de contacto, mejoren la experiencia del cliente y construyan una red más unida de clientes leales e influyentes. Además, cada sociedad decidirá el valor de IoT y cuánto están dispuestos a integrarse.